Preparación:
1. Ponemos a calentar el horno a 180º.
2. Cogemos las manzanas y les hacemos un corte alrededor del "rabito", nos tiene que quedar una especie de sombrero, un cono invertido. Las mejores manzanas para hornear son las de piel amarilla, pero puede hacerse de igual forma con las rojas. Las verdes serían demasiado ácidas.
3. Cubrimos de papel de aluminio el fondo de una bandeja rectangular de metal o "pyrex". Y distribuimos las manzanas allí, un poco separadas entre sí, que no estén apretujadas.
4. Apartamos por un momento los "sombreritos" y espolvoreamos azúcar y canela en polvo, y echamos también unas gotas de limón a cada manzana. Recolocamos los "sombreritos" y volvemos a echar un poco de azúcar, canela y limón por encima.
5. Se ponen al horno durante aproximadamente una hora (dependerá del tipo de manzana). Tienen que quedar espachurradas, de piel marrón y la pulpa un tanto deshecha.
Se sacan del horno y se dejan enfriar. Se sirven tal cual. En la nevera se conservarán varios días.
Es una manera ideal de aprovechar manzanas que ya se están poniendo viejas (piel rugosa) o tienen golpes (se les quita esa parte antes de ponerla al horno). Las hacéis todas de golpe y podéis ir comiendo durante la semana.
Es una comida ápta para todo el mundo que se suele recomendar en dietas blandas y enfermos, sobretodo por su fácil digestión.
1 comentario:
prueba a quitarle el rabito entero,de arrriba a bajo(con mucho cuidado)y le pones trozos de canela en rama, además de echarle azúcar,canela en polvo y cáscara de limón...Riquísimo!!!!!!
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